jueves, 20 de junio de 2013

Uno nuevo en la familia y hay que ponerlo en orden.

Hace muy poco, por avatares del destino, me pidieron ayuda para "restaurar - poner en funcionamiento y orden de marcha" un coche regalado a un amigo, que llevaba una temporada a la intemperie en un pueblecito de Galicia.

El coche en cuestión es un Citroën C3 1.1L gasolina, de las primeras ediciones.

Lo primero, es lo primero, un vistazo general, abrir capó, en éste caso, las 4 puertas y el maletero, con ello, nos percataremos de cómo está de carrocería e interiores el paciente...

Bueno, el coche, la verdad es que para tener 165.000 kilómetros, suena redondo, no parece tener óxido en ningún lado (recordemos que viene de una zona costera) el escape parece sustituido y en orden de marcha, la caja de cambios engrana bien, frena correctamente y no se va hacia ningún lado, no hace ruidos raros ni vibra al acelerar, no hay testigos encendidos, la suspensión no tiene demasiados rebotes...(en el caso que nos atañe, el coche, estaba con la ITV caducada hacía una semana, por lo que es más que conveniente hacerlo en un recinto cerrado, urbanización o cerca de casa y alejados del tráfico, no la vayamos a liar) Aunque "a caballo regalado, no le mires el diente", eso, a los señores de la ITV les importa un pito y hay que ver qué es lo que le puede fallar al coche para solventar el problema antes del examen.

Bien, el coche funciona, no se calienta, el electroventilador salta sin problemas, frena, no hace ruidos... todo correcto en principio.

Ahora pasamos a la chapa: como comenté antes, sin óxido, tiene un pequeño bollo en el portón trasero, algún arañazo típico de la intemperie, las ruedas están bien, sin cuartear... nada remarcable, salvo que.... Uno de los faros delanteros estaba muy quemado, casi opaco, algo totalmente inaceptable para la ITV puesto que el haz de luz que proyecta no es nítido, es más una "nube de luz".

Ya tenemos algo que arreglar para pasar nuestro examen.

El interior... he de decir, que el coche era de un ex veterinario, que usaba el coche prácticamente como UVI móvil animal...
Los asientos traseros estaban muy, muy, muy manchados, con cercos por todos lados y no hablemos de moqueta y recovecos, tenían pelo como para hacer pelucas para un regimiento, tierra y polvo por todos lados y un olor... indescriptible.

La limpieza interior del coche no es algo que te miren en la ITV si no pone en peligro a los ocupantes del mismo... además, comprobando los cinturones todos se bloquean perfectamente.

Bueno, vamos a ponernos al lío sabiendo a que nos enfrentamos...

Empezaremos por el interior, ya que entre otras cosas, necesita airearse bien y conviene que estén las puertas abiertas lo más posible.

Yo, siempre intento ir de lo más gordo a lo más fino y quisquilloso... empezaré quitando las alfombrillas.

Éste coche, tiene MUCHO más curro de lo normal, puesto que, a la dejadez del dueño anterior, hay que sumarle el trabajo que ha soportado... con lo que no me andaré con nimiedades para ahorrar tiempo.

Atacamos cogiendo la llave torx y soltando los asientos delanteros, que llevan 4 tornillos y dos clemas para los sensores de los airbag y el avisador del cinturón.

Ojo a la de curro que hay.
De esta manera y como se puede ver en la foto, al sacar ambos asientos del coche, podemos:

1.- Limpiar la ingente cantidad de pelos y suciedad pegada a las guías de los asientos de manera fácil.
2.- Limpiar la tapicería cómodamente en el exterior, sin tener que hacer posturas y contorsiones.
3.- Tenemos la parte de la moqueta que nunca vemos, a la vista y nos deja limpiar todas esas zonas, a parte de recoger calderilla para comprar unas cervezas que amenicen el día de curro que me espera.
4.- Podemos limpiar mejor la consola central donde está el freno de mano.

Siempre con unos buenos guantes de latex puestos, quitamos los mechones de pelo y calderilla a mano.

ahora soltamos la parte inferior del asiento trasero, que sólo va enclaustrado bajo el respaldo y con tres tornillos delanteros... exactamente para lo mismo que en el caso de los asientos delanteros.

Frutos secos a más no poder bajo el asiento trasero.


Bueno, una vez con el coche sin asientos y habiendo quitado las cosas más grandes a mano... sacaremos la aspiradora, vamos a darle a consciencia por toda la moqueta, bajo el asiento para quitar todas las pipas, kikos, ¿purpurina?, arena y trozos de cristales, quitamos la base del maletero y la bandeja y las sacamos, de hecho, hasta si nos vemos con ganas, sacamos la rueda de repuesto y limpiamos el hueco (lleno de arena de gato y demás parafernalia veterinaria).

Tras haber aspirado y reaspirado el habitáculo que quede con la menor cantidad de suciedad posible, los pelos y otra suciedad que queda, puede quitarse con cinta americana o de carrocero que deja menos pegamento, pegándola para que se lleve lo que queda hasta dejarlo como la patena. Hay otra opción que es quitar toda la moqueta, pero eso ya es un sinvivir...

La base del maletero, al igual que las alfombrillas sin ningún tipo de piedad, las tiramos al suelo y las barremos preferiblemente con una escoba de cerdas cortas y duras, una vez hecho eso, echamos bien de jabón y frotamos con un cepillo de cerdas de plástico, para posteriormente darle con agua a presión hasta eliminar el jabón que quede y se dejan secar al aire libre.

La base del maletero y la bandeja esperando su cepillado.

Vale, tenemos todo el interior virgen y limpio, vamos a limpiar el salpicadero con un producto para ello, los cristales con papel de periódico y cristasol, paneles y huecos de las puertas, para finalmente, armados con un cepillo de dientes usado y papel, vamos limpiando las pequeñas juntas de las piezas de plástico del interior, posavasos, reguladores...


Hay que limpiar éste tipo de juntas.


Ahora vamos a por lo realmente difícil... Los asientos!

Personalmente he probado muchos limpia tapicerías, o quita manchas, que van muy bien para una limpieza suave, sutil y normal, tanto en espuma como en polvo, que tras cepillarlo al secarse, queda bien.
Pero ésto es una limpieza mucho más profunda, donde hay que quitar cercos de vómitos e incluso sangre, dada la pasada vida del Citroën.

Vamos a poner los asientos en fila, llenamos un cubo con agua, jabón de vajilla (Mistol o similares) y un buen chorro de amoniaco perfumado, sin cortarnos... Con un cepillo de mano con cerdas de plástico, vamos cepillando sin piedad, enérgicamente los asientos, comenzando en el sentido de las puntadas del tapizado y luego como Dios nos dé a entender, saldrá espuma, pero no nos preocupemos, al acabar de frotar bien todo el asiento, lo dejamos secar un poco mientras seguimos con los demás. (OJO! sólo haced ésto con tapicerías de tela, ni se os ocurra con alcántara o cuero!)

Cuando los asientos se hayan secado un poquito, pasad un trapo húmedo sólo con agua para quitar restos de jabón. Repetid el proceso completo, las veces que sea necesario, que en mi caso, para el asiento trasero fueron 3!!! y tened en cuenta que luego los asientos estarán húmedos y hay que dejarlos secar (sea dentro o fuera del coche, pero es bastante incómodo llegar a un sitio conduciendo con la espalda y el culo mojados).

Aquí está el resultado!!!



Con el interior limpio y los asientos también, los volvemos a montar en el coche.
Para montar los asientos delanteros, que van con 4 tornillos, recomiendo primero, en el caso de que tengan, conectar las clemas de airbags y sensores, para posteriormente,  no apretar ningún tornillo a tope nada más comenzar, sino encarar los 4 y darles 3 o 4 vueltas antes de empezar a apretar bien.

Habiendo hecho todo ésto, damos 2 pasos atrás y podremos ver la grata diferencia que hay en el interior, parece nuevo, invita a entrar y dar un paseito!!!


Ale, toca el exterior:

Lo más sencillo es quitar el bollo que tiene de un golpecito en el portón trasero, parece un golpe de una patada o similar, ya que es eso, sólo una parte hundida en la chapa, sin arañazo ni nada... tener en casa una ventosa de las que compras en las grandes superficies como Feu vert, Norauto... nos viene perfecto (yo he sacado un montón de toques con ella) limpiamos la zona de polvo con un trapito húmedo, colocamos la ventosa, hacemos vacío y a tirar hasta que quede perfecto... ésto es muy sencillo.

Ventosa en cuestión.


Vamos a por la luz quemada:
Ésto es un mal menor, que ocurre en muchos coches independientemente de la marca y el modelo, el sol, el salitre, el tiempo... hacen que ésto ocurra.

Un faro quemado ya con la cinta protectora.

Para arreglar ésto hay unos pasos a seguir, que dan unos resultados estupendos.
Existen kits de reparación por cerca de 20€ que tienen todo lo necesario para hacerlo:

Kit 3M de reparación con acople de broca.

Sin duda un kit es lo más cómodo, puesto que si lo encontramos y con una taladradora de velocidad variable, dejaremos los faros listos en media horita.

Si no disponemos del kit o no lo encontramos, con ir a una tienda especializada en pintura tendremos todo lo necesario, aunque sea algo más aparatoso y largo.

Necesitamos:
- Lija de grano 500.
- Lija de grano 800.
- Lija de grano 3000 para uso al agua.
- Pulimento
- Esponja.
- Cinta de carrocero.

Lo mejor es desmontar los faros, pero sino, no hay problema, con la cinta de carrocero, rodeamos bien los contornos del faro, incluso si vamos a hacerlo a mano, un buen trozo de chapa alrededor, para evitar arañazos fortuitos.

Comenzamos a lijar con la lija 500 sin piedad, es aparatoso, porque estamos arañando el faro, sale mucho polvillo blanco, no nos preocupemos, seguid hasta que el papel de lija ya no lije más. (Si hay arañazos muy profundos, repetid la operación).

Tras la lija 500, con un trapito húmedo limpiamos los excedentes de polvo y una vez limpio el faro, con la lija 800, repetimos exactamente igual que antes.

No os preocupéis por el hecho de que esté todo el faro nublado, poco a poco veremos la luz, nunca mejor dicho.

De nuevo tras limpiar los excedentes de polvo y armados con un spray con agua, pasamos a la lija 3000 mojada, vamos mojando la lija y el faro periódicamente, hasta empezar a ver claridad por todo el faro.

Al terminar con la lija 3000, aplicaremos el pulimento por el faro y frotamos enérgicamente por toda la superficie, hecho ésto, el faro debería estar ya muy claro y transparente, quitamos la cinta de carrocero y deberíamos ver algo así:

Faro tras la operación.

Ahora sólo nos queda darle un buen lavado al coche con agua y jabón y listos para la ITV!!!

A parte de ésto, le cambié la radio para que tuviera bluetooth y entrada aux para conectar un MP3 y coloqué bien el tirador del capó que se había descuadrado.

Es recomendable, al adquirir un nuevo coche, hacerle un cambio de aceite y filtros para llevar una contabilidad y saber cuándo toca el cambio... pero eso lo veremos más adelante.

Un saludo y espero que os haya ayudado y entretenido.








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